viernes, julio 29, 2005

Con preemergencia y todo

Creo que soy injusto con mis amigos Opus Dei, de hecho, chateando por messenger con uno de ellos mientras estaba en Europa, lo que me dijo fue: "Dios te quiere más a ti que a mi".

Y yo sin creer en Dios (o no en el mismo Dios que mi amigo cree) no pude dejar de estar de acuerdo.

Estoy de vuelta en Chile, de vuelta en pleno frio invierno con la contaminación y la preemergencia y los parques sin ardillas y la basura que nadie la retira.

Debería estar depresivo y sin embargo no lo estoy.

Razones materialistas para estar feliz: el teléfono Siemens modernillo y polifónico que el día de mi cumpleaños me encontré botado en Paris (Rue Daumesnil, 5 AM, metro Nation, justo antes del inicio de la Promenade Plantée), le puse el chip de mi viejo celular y lo aceptó! Asi que ahora tengo celular nuevo. Solo me falta comprarle el cargador.

Razones materialistas para estar preocupado: Le debo a la VISA una cantidad que no puede ser superior a los 2 millones, pero que francamente no tengo idea a cuanto asciende, y ya debería tener intereses acumulados. Glup. Y yo sin pega.

Razones frívolas para disfrutar estar en Chile: Ahora puedo volver a leer LUN y entender de que hablan, no he visto todavia la Granja Vip pero quiero verla, y quiero leer todo sobre los trapos sucios que se sacaron Villouta y Castell, y quiero saber quien diablos es Jenniffer Byrne y si Daniella Campos le comía o no le comía el biscocho. Y ahora que de nuevo tengo cable pude ver "But I'm a cheerleader" en Cinecanal.

Razones para preocuparse de estar de vuelta en Chile y su frivolidad: Básicamente las mismas del punto anterior, con la excepcion de "But I'm a Cheerleader", que me gusto harto.

No, pero bien igual. Me deprime un poco que a las ocho ya esté oscuro, cuando recuerdo que eran las 23:00 en el Trocadèro y no comenzaban los fuegos artificiales de la Torre Eiffel porque el cielo estaba muy luminoso todavía.

Pero me entusiasma leer que Villouta en su blog quiere armar un equipo de rugby gay, yo me inscribiría, pero no tengo dinero, y primero debería recuperar peso.

Mi vieja habitación fue reconvertida por mi madre, que botó los muros y se mudo a ella con mi padre. Ahora estoy compartiendo pieza con mi hermano y con Elmer la cacatúa, pero en compensación me compraron un colchón nuevo que es simplemente delicioso.

Y de nuevo tengo internet banda ancha gratis a toda hora, y cebollitas perlas para picar, y leche condensada y marraquetas y frutas gratis cuando desee.

Así que aunque alguien me diga que soy un loser, que a los 27 años uno no puede seguir viviendo con sus padres y no tener trabajo y no tener auto ni dinero, ni pareja, ni nada.

Well, frankly, my dear. I don't give a damn.

Y ahora les lanzo un par de datos sobre las nuevas tendencias que se vienen desde Europa:

- La Gasolina, la canción, si. La escuché en Zagreb y en Bruselas, y en Viena y en Londres y en Madrid y en todos lados. Pero me parece que ese destino inexorable a Chile ya llegó.

- Las camisas y camisetas con trozos de telas cosidos. Furor en Inglaterra, tomas una camisa que te quede grande, le rebajas un centímetro y luego se lo coses en diagonal en el sentido que quieras, no importa si los puntos quedan bien o mal. Es lo que se lleva allá. Mientras tu ropa más se parezca a un cuadro de Antoni Tapiès, mejor. Y vale la pena hacerlo uno mismo antes que las tiendas empiezen a utilizar sus restos de tela y te cobren el doble por sus desechos reciclados.

- Los Sea-Monkeys. Estan de vuelta, a mi hermano le traje un acuario del Science Museum. Se supone que ahora las artemias estan modificadas para que vivan por más tiempo y sean resistentes. Yo pensaba que los sea-monkeys eran un mito hasta que los vi vivitos y coleando. En España han empezado a promocionarlos, a Chile deberían llegar esta navidad. Si alguno de ustedes es distribuidor, mejor que se apure.

Pero en general las tendencias llegan rápido al Chile de ahora, las pulseritas de caridad no se demoraron mucho, y Harry Potter solo espera ser traducido, pero las películas llegan casi que antes. Si solo las de Hayao Miyazaki tuviesen una ruta así de expedita, "El castillo ambulante" se estrena en agosto en Inglaterra, a Chile debería llegar, si llega, con suerte el 2006.

Pero si es por cine, vayan a ver en cuanto puedan "The Edukators" y "My summer of love", lo mejor que vi en Europa.

Y eso, sigo aterrizando, todavía estoy un par de metros sobre el suelo. Sigo pensando que atraigo miradas apreciativas, pero le atribuyo eso al Jet-Lag.

Creo que me voy a tener que mudar al viejo blog. Ya que no estaré viajando más por un tiempo.

Tal vez cuando aterrize completamente. Ya he aterrizado un poco tras pàsarme dos horas haciendo fila en Inmigración (o sea, ni en Heathrow) y luego en la Tesorería general de la república(para que después me dijeran que tenía que ir a otro lado). La burocracia chilena le da patada a la francesa y es un recordatorio constante de que ya no estoy en el primer mundo.

Pero de momento estamos bien. Tolerable, con preemergencia y todo.

4 Comments:

At 29 julio, 2005 18:10, Blogger Manuel said...

Te apoyo totalmente en ese terror -justificadísmo- que inspira la llegada de esa inefable canción (sólo mencionarla me da escalfríos).
En lo que no, es el gusto que te dejó "But I'm a cheerleader", que tiene muy buena protagonista, pero la desperdicia en demasiada automplacencia.

 
At 29 julio, 2005 21:41, Blogger jovenbunbury said...

lo de la camisa me pareció interesante, pero creo que necesito un ejemplo gráfico pa entenderlo.

suerte y bienvenido

 
At 06 agosto, 2005 12:29, Blogger Polilla said...

Más apreciaciones varias (se nota que me estoy poniendo al día con tus blogs?):
- A veces te envidio y quisiera estar viviendo con mis padres, y ser loser como dices...
- Odio "La Gasolina"!!!!!
- Yo no he visto nada de los Sea Monkeys por acá. Estás seguro?? Pasa el dato entonces porque yo quiero!!!!
xxx

 
At 07 marzo, 2007 08:06, Anonymous Anónimo said...

Enjoyed a lot! » » »

 

Publicar un comentario

<< Home